Que ver imprescindible en Sofia
Sofia ha sido inmerecidamente olvidada durante muchos años, y el país tampoco ha sabido venderse bien a pesar de las joyas que posee. Gracias a los circuitos turísticos de los Balcanes y a las aerolíneas de bajo coste Sofia se ha vuelto a abrir a Europa y ha reaparecido en los itinerarios de muchos viajeros.
Esta ciudad era el punto de inicio y final de nuestra ruta de 4 días por Bulgaria en coche. Así como el país nos había enamorado ya solo creando el itinerario, la capital no nos llamó especialmente la atención, así que las expectativas eran bastante bajas. Una vez allí, con el tour, las iglesias, las ruinas y las historias la ciudad nos cautivó.
Si viajáis desde España tenéis vuelos directos, con lo que pasar un finde o un puente en Sofia es más que recomendable.
La ciudad no siempre se llamó Sofia. En el siglo VIII a.C los tracios se asentaron en la zona y llamaron al lugar Serdica, siglos después la región acabó bajo el dominio de Alejandro Magno hasta que finalmente los romanos la conquistaron y pasó a llamarse Ulpia Serdica. Desde entonces el paso de las distintas civilizaciones que han convivido en ella hacen que la mezcla cultural en Sofía sea más que palpable. Te sorprenderás contemplando iglesias del siglo II envueltas por edificios de la época comunista, tiendas internacionales al lado de un teatro neoclásico bombardeado en la II Guerra Mundial, restos romanos al lado de mezquitas otomanas y sinagogas. Todo ello mientras te llega el olor a comida que preparan las risueñas señoras búlgaras en sus puestecitos.
Información práctica
Como llegar: Sofía está bien conectada con otras ciudades europeas, por lo que no tendrás excusa para no visitar la capital búlgara:
- Avión: El Aeropuerto Internacional de Sofía (SOF) es el principal aeropuerto del país y se encuentra a solo 10 km del centro de la ciudad. Allí puedes tomar un taxi (20-25 minutos hasta el centro), un autobús (línea 84) o el metro (línea M1, 20 minutos hasta el centro).
- Tren: Sofía tiene una estación central de trenes que conectan toda la región. Los trenes internacionales conectan Sofía con ciudades como Belgrado, Skopje y Estambul.
- Autobús: una opción económica para desplazarte a otras ciudades europeas y búlgaras. Las estaciones de autobuses más importantes son la estación de autobuses central y la estación de autobuses de Zeleni Vasil.
Moverse por Sofía: el centro de Sofía se puede hacer perfectamente andando en un día. Si tu hospedaje queda un poco lejos dispones de metro, autobuses y tranvías con precios bastante baratos, los tickets puedes comprarlos en los kioscos de prensa, en las estaciones de metro o directamente al conductor.
Moneda y propinas: la moneda oficial es el lev búlgaro (BGN). 1 lev equivale a 0,5€ (2024). Las tarjetas de crédito son aceptadas en la mayoría de los comercios, restaurantes y hoteles, pero por si acaso llevad efectivo, especialmente en mercados o pequeños comercios. Las propinas no son obligatorias, pero son apreciadas, especialmente en restaurantes y cafeterías. La propina suele ser de un 10% de la cuenta total.
Idioma: el idioma oficial es el búlgaro, leeréis en varios sitios que muchas personas hablan inglés, especialmente los jóvenes, viendo mi experiencia discrepo bastante con eso. Os puede resultar útil llevar una hoja con dibujos (un wc, un hotel, un avión…) o algunas frases búlgaras. Aquí tienes algunas:
- Hola: Здравейте (Zdraveyte)
- Gracias: Благодаря (Blagodarya)
- ¿Cuánto cuesta?: Колко струва? (Kolko struva?)
- ¿Dónde está…?: Къде е…? (Kade e…?)
Electricidad y enchufes: enchufes de tipo C y F, con un voltaje de 230 V y una frecuencia de 50 Hz. Si tu dispositivo tiene un enchufe diferente, deberás llevar un adaptador.
Que ver en Sofia
Aquí os dejamos una lista de lo que creemos imprescindible que veáis en vuestro viaje por esta ciudad:
La Catedral de Alejandro Nevski
Horario: todos los días de 7h a 19h
Precio: gratuita, para hacer fotos dentro deberás pagar 10 levas
El lugar más emblemático de la ciudad es la Catedral de Sofia, construida en honor a Alejandro Nevski, venerado como santo por la Iglesia ortodoxa por su defensa del cristianismo ortodoxo frente a los ataques de católicos, teutones y tártaros.
Con sus casi 3.200 metros cuadrados y capacidad para 10.000 personas, no es solo la iglesia más grande de Bulgaria, sino una de las mayores iglesias ortodoxas del mundo.
Este edificio ortodoxo se empezó a construir en 1882 con donaciones del pueblo que querían un lugar que honrase a los soldados rusos y revolucionarios búlgaros que fallecieron durante la guerra ruso-turca, que liberó a Bulgaria de la ocupación otomana. Los materiales y decoraciones fueron traídas desde múltiples ciudades europeas.
A simple vista por fuera impresiona su enorme tamaño, pero no la describiría como una de las más bonitas que haya visto a pesar de tener sus cúpulas doradas que le dan cierto encanto. Te das cuenta de lo equivocado que estás cuando cruzas sus puertas y visitas el interior de la Catedral, que ahora sí, afirmo que es una de las más espectaculares que he visto en Europa, y no han sido pocas.
La ausencia de bancos en su interior dejan espacio para que el visitante se pasee por todo el recinto admirando sus frescos y mosaicos, que ocupan todo su interior. Allí donde terminan los mosaicos empiezan paredes y suelos de mármol con diversos dibujos, colores y formas. En resumen, un espectáculo para la vista.
La basílica de Hagia Sofía
Horario: 10 a 17h30
Precio: entrada a la basilica es gratis, la necrópolis romana de Serdica cuesta 6 levas
¿Sabías que la ciudad de Sofía tomó el nombre de una basílica? A pocos metros de la Catedral se haya esta modesta iglesia, pero de gran importancia en la historia de Sofia. La iglesia en sí es una de las más antiguas de la capital búlgara (siglo IV) y era lo primero que veían los viajeros antes de llegar a las puertas de la ciudad, así poco a poco la ciudad romana de Serdica fue tomando el nombre de Sofía.
A lo largo de los años fue derruida por invasores, reconvertida en mezquita por los otomanos y vuelta a erigir en el siglo VI por el emperador bizantino Justiniano I.
Hoy en día es posible visitar la necrópolis romana de Serdica y admirar las tumbas y los frescos y mosaicos romanos de los siglos III y IV.
Seguro que en vuestra visita podréis ver que la basílica no tiene campanario, así que deberéis buscar la campana de Sveta Sofia al lado de la iglesia, colgada de un árbol.
La Plaza de la Independencia o Largo
En pleno corazón de la ciudad, la Plaza de la Independencia es un espacio tranquilo donde conviven edificios de épocas y culturas muy diversas. Párate un momento y observa la arquitectura que rodea la plaza.
La Plaza de la Independencia fue diseñada en los años cincuenta para ser el centro representativo de la capital búlgara. Estaba repleta de símbolos comunistas como la estrella roja y la escultura de Lenin, que con el tiempo fueron retiradas y/o substituidas.
En la plaza puedes observar los siguientes edificios:
- Asamblea Nacional de Bulgaria: antiguamente sede del extinto Partido Comunista Búlgaro.
- Consejo de Ministros de Bulgaria: donde se encuentran los grandes almacenes TZUM.
- Palacio Presidencial: aquí se puede ver el cambio de guardia cada hora en punto. Alberga en su interior la Iglesia de Sveti Georgi, hablaremos de ella luego.
- Estatua de Sofía: substituye a la estatua de Lenin. Representa la figura de Sofia rodeada de tres objetos que representan a sus hijas, toda ella de color negro y dorado.
- Yacimiento arqueológico de Serdica
- Iglesia de Santa Petka o Sveta Petka: dedicada a la mártir cristiana del siglo III Santa Petka. Contiene frescos del siglo XVI con escenas del Nuevo Testamento, es muy pequeña y con horarios de apertura un tanto aleatorios. Nosotras encontramos cerrada la puerta principal y nos metimos por unas escalerillas hacia la parte baja de la iglesia, que estaba abierta.
- Mezquita Banya Bashi
Iglesia de Sveti Georgi
Entrada: gratuita
La Iglesia de Sveti Georgi o de San Jorge es uno de los lugares religiosos que el gobierno comunista quiso esconder pero no se atrevió a derruir, así que construyó el Palacio Presidencial rodeando las ruinas de la antigua ciudad romana de Serdica y la iglesia.
Donde antes se encontraba un templo pagano ahora se encuentra esta iglesia del siglo IV dC, que en el siglo XVI fue convertida en una mezquita. Merece la pena entrar a la iglesia y observar el techo. Allí donde parte de los frescos se caen a trozos dejan a la vista pinturas todavía más antiguas de etapas anteriores.
Yacimiento de la antigua Serdica y Mezquita Banya Bashi
Conquistada en el año 30aC todavía se puede explorar el legado que los romanos dejaron en el centro de la ciudad. El Foro Romano, situado cerca de la Plaza de la Independencia, es uno de los hallazgos más interesantes.
El yacimiento se encuentra en los alrededores del metro Serdika, donde se puede visitar una parte acristalada y otra descubierta en las que verás los muros de algunos edificios, los mosaicos y restos de calzadas. La entrada es gratuita y también se pueden disfrutar desde la calle.
La Mezquita Banya Bashi fue erigida durante la ocupación otomana de Bulgaria. Es el único templo de la comunidad musulmana en Sofía y destaca por su cúpula de 15 metros de diámetro, no obstante su exterior y su interior son bastante austeros. La entrada es gratis, pero recuerda que las mujeres deben taparse el pelo y las rodillas. En la entrada te pueden dejar ropa para taparte.
Catedral de Sveta-Nedelya
Entrada: gratuita Horario: 10 a 17h30
Aunque sea una reconstrucción no deja de ser un punto importante de la historia de Bulgaria. La Catedral de Sveta-Nedelya o de Santo Domingo es otra Iglesia Ortodoxa Búlgara, la original fue levantada en 1867. Lo que vemos hoy en día es una reconstrucción ya que en 1925 la iglesia fue destruida por una bomba, un tentado perpetrado por miembros del Partido Comunista Búlgaro que querían terminar con el zar. Éste llegó tarde al evento y no presenció el ataque pero en su lugar el atentado acabó con la vida de 128 personas.
La Iglesia Rusa
Entrada: gratuita.
La Iglesia de San Nicolás es conocida como la Iglesia Rusa porque fue construida para ser la iglesia oficial de la embajada de Rusia y toda su comunidad. Incluso fue diseñada por un arquitecto ruso, Mikhail Preobrazhenski, quien se inspiró en las iglesias moscovitas del siglo XVII. Sus cinco cúpulas doradas destacan desde lejos, y las campanas de su interior, donadas por el zar Nicolás II también están bañadas en oro.
Sinagoga de Sofía
Horario: de 9h a 17h de domingos a viernes (cierra los sábados)
Precio: 5 levas
Antes dijimos que por Bulgaria habían pasado un montón de culturas, ¡no nos podíamos dejar la Sinagoga! ¡Así es! La Sinagoga de Sofía es la tercera más grande de Europa, por detrás de la de Ámsterdam y Budapest, y fue construida a comienzos del siglo XX. Su arquitectura es una mezcla de neoárabe con detalles venecianos.
La Sinagoga tiene capacidad para 1.300 personas, aunque el número de fieles ha descendido bastante en Bulgaria. La creencia popular dice que es por el Holocausto en la II Guerra Mundial, nada más lejos de la realidad, ya que el zar de Bulgaria se las ingenió bastante bien para evitar deportar a los judíos haciendo una de las cosas que mejor saben hacer los búlgaros, procrastinar. El motivo principal es que muchos de los fieles judíos emigraron de vuelta a Israel.
Teatro Nacional Ivan Vazov
En el City Garden o los jardines de la ciudad encontramos el teatro más importante de Sofía, dedicado a Ivan Vazov, quien es considerado el poeta nacional de Bulgaria.
Se construyó en 1907, y pese al incendio de 1923 y las secuelas de los bombardeos en la Segunda Guerra Mundial, su estilo neoclásico se recupero en su posterior reconstrucción. Ahora tiene capacidad para 1.000 personas y si quieres visitarlo, puedes comprar entradas para alguna de sus funciones que suelen ser bastante económicas.
En medio de su fachada adornada por columnas podemos ver el nombre del teatro en alfabeto cirílico, que poca gente lo sabe pero tuvo su origen en Bulgaria y luego se extendió por los Balcanes.
Antiguos baños termales de Sofía y sus fuentes
En el centro de Sofía, justo al lado del Parque del Teatro Nacional, se encuentran el edificio de las antiguas termas donde los búlgaros venían a socializar los domingos mientras se bañaba. El edificio hoy en día es el Museo Regional de Historia y ya no se usa como baño.
No obstante las aguas siguen fluyendo por las fuentes que se ubican justo al lado del edificio. Podréis ver muchos búlgaros cargados con botellas que van a rellenarlas en estas fuentes. El agua es potable, aunque es olor es un poco peculiar. Antes de beber tocad el agua con las manos, algunas salen muy calientes y ¡os podrías quemar!
Museos que podéis visitar en Sofia
Si os quedáis unos días en la ciudad y queréis profundizar más hay varios museos interesantes que visitar. Entre los más relevantes están:
- Museo de Arte Socialista: Fuera del centro, n él se pueden encontrar alrededor de 80 estatuas de la etapa socialista entre las que destacan la estrella roja y la estatua de Lenin que había en la Plaza de la Independencia.
- Museo Nacional de Historia Militar: aquí encontrarás vehículos militares y armamento usados por el ejército búlgaro en diferentes momentos de la historia: la guerra ruso-turca (1877-1878), las dos guerras mundiales y la segunda mitad del siglo XX.
- Arqueológico de Bulgaria: con el rico pasado histórico de Bulgaria, conserva gran parte de los hallazgos de la Serdica romana.
- Museo Histórico Regional: ubicado en los antiguos baños termales de Sofía.
- Museo Nacional de Historia: situado en Boyana y con la posibilidad de comprar una entrada combinada con la iglesia, contiene objetos históricos de Bulgaria desde la época de los tracios.
- Galería Nacional de Sofía: ubicada en el antiguo Palacio Real, contiene alrededor de 50.000 piezas de arte búlgaro. Es la mayor colección de arte del país.
El Monasterio de Rila
El Monasterio de Rila es una de las excursiones más populares desde la capital, y lo merece. Situado a unas dos horas en coche, este monasterio es Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO y ofrece un vistazo a la rica historia espiritual de Bulgaria. Su arquitectura medieval y las impresionantes vistas de los montes circundantes lo convierten en un destino obligatorio si vas a Bulgaria.
Os dejaré toda la información en el post sobre el Monasterio de Rila, como llegar, donde comer y todo lo que se me ocurra.
Si no disponéis de vehículo podéis optar por contratar una excursión desde Sofia por el monasterio de Rila e iglesia de Boyana.
Cultura y gastronomía: Qué comer en Sofía
Sofía es un excelente destino para probar la comida típica de Bulgaria, que combina influencias turcas, griegas y balcánicas. Algunos de los platos más populares que puedes probar son:
- Banitsa: Una especie de pastel de hojaldre relleno de queso, huevo y yogur.
- Shopska salad: Una ensalada fresca con tomate, pepino, cebolla, queso blanco búlgaro y aceite de oliva.
- Kavarma: Un guiso de carne (generalmente cerdo o pollo) cocinado con verduras y especias.
- Tarator: Una sopa fría de yogur, pepino, ajo y nueces, ideal para los meses más cálidos.
- Rakija: Un licor fuerte de frutas, muy popular en los Balcanes, que puedes probar como aperitivo.